¡QUÉ SEXY TUS MÚSCULOS!

Qué interesante se sienten las curvas que se van formando en tus brazos, en tus hombros, en tu espalda y en tu abdomen por tus músculos marcados. He descubierto partes del cuerpo que no sabía que teníamos, voy a aprendiendo de anatomía contigo y creo que es la asignatura que más me gusta. Pues sin esfuerzo la estudio cada día con más y más interés. 

Repaso mi asignatura favorita con disciplina al despertar sobre tus brazos y al dormir sobre tu pecho. Cariño, he hallado muy cómodos tus pectorales y tus bíceps cuando de conciliar el sueño se trata, se sienten tan reconfortantes que me provocan no despegarme de tu cuerpo desnudo y sentir la necesidad de hundirme y fundirme en él.

Mis dedos también son fanáticos de descubrir nuevas rutas de placer en tu cuerpo, de dibujar cada relieve de tu espalda, enmarcar tu tríceps, tus deltoides y tu trapecio tan ejercitados y tan sensuales.

No sabía que me podía excitar taaanto con tan solo tocando, viendo y conociendo tu cuerpo, siento cómo mi mente se excita con sentir tus músculos tensos, con mirar tu cuerpo definido y conociendo qué estimulación te gusta. 

Parado te ves taan delicioso, viniendo hacia mí te ves tan rico; pero sobre mí tus brazos se sienten y se ven aún más sexy de lo normal, me prende muchísimo tus músculos tensos, me excita mucho ver tu cuerpo penetrandome. 

Comienzo a lubricar más y más al apretar tu espalda, tus nalgas y tus brazos, mientras tu pene va estimulando mi vulva húmeda. Siento cómo mi cuerpo reacciona a lo sensual que eres, a lo mucho que me prende cómo se ve tu cuerpo. 

Me enloquece al punto de estallar sentir tus manos sobre mi cuerpo, ver tus brazos tensos y con las venas saltadas sobre mis senos y mis nalgas. ¡Qué rico eres! ¡Qué rico me pones! ¡Qué rico es coger contigo! 

¡Vamos al éxtasis juntos! Pon a RINGO en tus testículos, mientras me haces el mejor oral para no olvidarte y déjame masturbarte en un 69 perfecto. ¡Pero qué rico es tenerte así! ¡Pero qué ricos son tu trasero y tus piernas!

Me siento en un paraíso de placer al tocarte, al mirar que me comes y al ver tu gran cuerpo. Déjame verte y tocarte, mientras me vengo, déjame dedicarte este orgasmo.

¡MI ORGASMO! Me sonríes y llevas mi mano a tu abdomen, ¡me encantas! Sin duda es un éxtasis que lleva tu nombre. 

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