TE VES SEXY EN TACONES
Te vi caminar por el restaurante y me pareciste sumamente sexy, ¡qué brutalmente sensual te ves! Ese vestido con increíble escote por la espalda que me deja ver tu columna es cada vez más antojable. Además, esas medias con liguero son tan encantadoras, cariño.
No me canso de imaginarte sin ese vestido, con solo la lencería que traes y me dejas ver entre cada abrazo que te doy. Me miras y me sonríes, eres malvada y salvaje, sabes que ando deseando todo tu cuerpo ahora, me concedes el coqueteo con tu mano sobre mi pierna, con tus dedos sobre mis manos y tus labios sobre la comisuras de los míos.
¡Pero qué sensual! En lo único que pienso ahora es en llegar a casa para cogernos frente al espejo. Quitarte ese vestido y dejarte en lencería junto a tus tacones.
¿Te has dado cuenta cómo se ven tus nalgas con esos tacones? Tus pantorrillas, tus piernas y tus nalgas se definen más y me excita más, cariño. Tengo ganas de apretarlas, tenerlas en el cuello y de besarlas.
¡Cógeme aquí! Me dices, mejor vamos a casa. En punto de las 9:00 cruzamos esa puerta y ya me estás quitando el pantalón, ya te estoy quitando este vestido.
Vamos al espejo y te compruebo que eres sensual con tu cabello rizado, con tus senos adornados de encaje y tú cintura entallada por un liguero que sostiene tus medias, unas medias que cubren esas grandes y sensuales piernas.
Tan solo pienso que te ves increíble en tacones y con toda tu lencería. Hago a un lado tu tanga y te mastubo con AURA. Eres la más feliz, la más orgasmeada y la más gozosa de este momento. ¡Eres la más sexy, cariño!
Mira ese rostro desfigurado, esas piernas rígidas y esos senos vibrando de placer. ¡Qué sensual! ¡Qué inolvidable eres!